En primer lugar, he escogido leerme “Tiempos
difíciles” de Charles Dickens para poder contrastar lo que escribió en esta
gran obra con la sociedad de la Inglaterra Victoriana que es una parte de mi
trabajo de ésta asignatura. Me ha llamado mucho la atención como ha tratado
algunos aspectos de forma fría y bastante neutral y eso le da un aspecto
distante y al mismo tiempo, interesante.
Dickens se concentra en destacar a dos clases
sociales:
-
Patronos
-
Trabajadores
De estas dos, diferencia claramente la educación
recibida, lo hace a través de la descripción de una familia muy bien
posicionada en que el padre es miembro del Parlamento y una muchachita
procedente de la clase baja en que el padre tiene como oficio de payaso en un circo. No se
olvida tampoco, de que las dos clases se desprecien mutuamente y resalte la distancia de una de la otra,
mediante la novela (que tiene matices ciertos y otras inventadas) va dejando caer
leyes que se debían cumplir.
Una de los derechos que no se podía quebrantar era
la del matrimonio, en uno de los capítulos se puede leer como un trabajador de
una fábrica va a hablar con su patrón para preguntar cómo podría deshacer un
matrimonio que lo está llevando a una situación desastrosa, el patrón en cierto
modo se escandaliza y se enfada, alega que un matrimonio es para toda la vida y
que se estaba tanto en lo bueno como en lo malo, disolverlo era ir en contra de
un sacramento muy importante. En esta parte, ya está destacando que en la época
victoriana algo que se mantenía a rajatabla era la religión y que se debía ser
muy devoto en ello.
Relacionado con este tema, el matrimonio no es igual
entre clases, los trabajadores aún pueden escoger entre ellos y poder unirse en
matrimonio con una persona de la cual se quiera y sea mutuo en cambio, familias
pertenecientes a grandes empresarios o políticos, los enlaces pueden ser por un
interés para incrementar el patrimonio y así conservar su puesto en la escala
social. Se centra mucho más en una sociedad política por lo que ya deducimos
que la monarquía poco papel tenía dentro del gobierno, el rey reina pero no
gobierna y nos podemos dar cuenta por su ausencia en toda la obra.
Por poner un ejemplo práctico, en este libro se
destaca dos matrimonios claros: uno de la clase trabajadora en que el pobre
obrero quiere saber algún modo de poder acabar con el que no sea la muerte y el
del patrón que se casa con la hija de su amigo parlamentario 30 años más joven que
él y, que al final se ha de tragar todas sus palabras sobre la fidelidad y
hasta el fin de sus días. Son dos puntos de vista diferentes pero que van por
el mismo camino, uno a causa de no tener dinero suficiente, no puede recurrir a
tribunales ni juicios ya que no aseguran al cien por cien que se lo pudiesen
anular y podría acabar en la más absoluta miseria en cambio, el patrón esa
disolución del matrimonio, no le costaría nada por tener todo a su favor.
La educación se basa en todo que sean hechos y no imaginación,
destaca que lo real es lo que más cuenta y no el uso de las fantasías, por
ello, todo lo que esté relacionado con la diversión no está bien visto ya que
se califica de holgazanería. Son unos años en que la industrialización es lo
más importante y está en su pleno auge, es lo que va teniendo mucha salida a
nivel europeo y lo que mantiene a Gran Bretaña en ser la primera potencia del
mundo. Está en cabeza y por lo tanto, tener una industria era tener un gran
tesoro, ser miembro del Parlamento también abría una puerta que a la gran
mayoría tardaría en poder disfrutar.
En este terreno la educación no es igual para todos,
es un privilegio que solo lo puede disfrutar quien tiene dinero o pertenece a
una clase media-baja. Es muy difícil escalar en esta pirámide tan bien
construida, los que reciben una buena educación, pueden aspirar a tener un
puesto ya sea en el banco o alguna institución relacionada con economía o
política pero, vemos que no todo es oro lo que reluce en una sociedad tan bien
organizada. Es muy difícil saber si en verdad podrían existir casos como se
describe en “tiempos difíciles” pero hasta un origen se puede inventar para
ganarse el respeto de todos.
En el campo de la fábrica, vemos que hay una
organización que se podría describir como sindical, se quejan de la vida
insalubre que les toca vivir y lo poco que les pagan por un trabajo que les
puede costar la vida y la salud de muchos. La solidaridad que tienen entre
ellos es lo que carecen por parte de sus patronos que serían los que han de
velar por ellos y de su seguridad, lo podemos enlazar con el nacimiento del
cartismo y todo lo que desenvuelve este movimiento. En contra de los avances
tecnológicos ya que supone pérdidas de puesto de trabajo, no hay que olvidar
que viven en una ciudad que la salida es trabajar en una colonia industrial, si
les quitaban lo único que sabían hacer, era muy difícil poder mantener a la
familia y eso les conllevaría a una miseria de lo más absoluta.
Carecemos de información del trabajo infantil pero
se sabe que en la época victoriana en las fábricas también había mano de obra
de éstas, mujeres y niños eran más baratos de contratar que no un hombre. Fácil
es encontrar toda una familia trabajando bajo las órdenes de un mismo patrón ya
que era una manera de que entrase un poco más de dinero en un mismo techo para
poder subsistir en estas condiciones. Las clases altas no quieren escuchar las
protestas porque, según ellos, ya viven de acuerdo a su condición y no deberían
esperar mucho más, la ignorancia de cómo podían vivir sus propios trabajadores
era un sistema para no ceder a ninguna petición, miraban hacia otro lado y de
su forma de pensar no bajan nunca.
En cuanto a la vida de los obreros se podría resumir
que se basa en ir al trabajo durante unas horas y vivir en una comunidad todos
juntos, se ve en esta parte como se organizan en lo que ahora llamamos
sindicatos para discutir, convocar y llevar a cabo una huelga ¿para qué? Para
que les hicieran caso a sus quejas, poder trabajar en unas condiciones mucho
mejor de las que está ahora. Los patrones no hacen caso, quieren llevarlo a su
manera ya que son insignificantes, si ellos no están de acuerdo con estas
condiciones, otro lo aceptará, no tienen en cuenta que han ido cambiando de
ideología gracias a las nuevas corrientes que han ido penetrando en el país.
Las normas, leyes y derechos las marcan los altos
cargos, es de lo que se quejan los trabajadores pero eso sí, gozan de una
mínima libertad que carecen un parlamentario. Tienen más tiempo para pensar, se
distraen como pueden para olvidar las horas que han podido estar encerrados en
una fábrica que les puede llevar a una muerte segura, el pensamiento de ser la
primera potencia, la más rica y que goza de un gran imperio, ellos no lo ven
puesto que, no se benefician de ello. Trabajan para sacar a flote Gran Bretaña
y ser reconocida como tal, gracias a la industrialización tienen trabajo sí,
pero sus libertades son las mismas y parece ser que nadie les escucha.
Toma un giro espectacular la novela en el caso
particular del robo en el banco del señor Bounderby, se acusa de dicho crimen a
un trabajador despedido por éste, Stephen Blackpool y al final está en busca y
captura. Es despreciado por sus propios compañeros de trabajo al no querer
unirse con ellos a las protestas y también es despreciado por su patrón por no
querer desvelar los pensamientos de los demás trabajadores y dar su punto de
vista en este asunto. Saco a la luz esta parte de la novela ya que, describe
como la mujer de Bounderby, declara la verdad sobre su visita a este hombre,
defiende a la clase trabajadora y cree firmemente que este hombre no es el
autor del robo.
Asimismo, el padre de la chica, tiene fe que su hija
tenga razón y confía que Stephen aparezca pronto para aclarar el asunto. Esto
podría estar relacionado con la historia real de Gran Bretaña en como los
partidos políticos hacen auge de tener en cuenta a esta clase social, de
empezar a escuchar lo que la población quiere y no solo a una minoría, es un
momento que se piensa en una reforma electoral para introducir a esta clase en
tener derecho a voto y opinión sobre su propio país. Los robos lo puede cometer
cualquiera y siempre, el que menos te esperas, en este caso no es un
insignificante trabajador sino una persona que desciende de un parlamentario,
para honrar el nombre del trabajador, bajo los carteles de que se ofrecía
recompensa a quien supiera donde estaba, se escribió el nombre del verdadero
culpable.
No todo recae en la educación sino también en tener
moralidad, esto es lo que demuestra estas páginas del libro, no sólo se ha de
tener en cuenta que lo que importa es lo que se puede ver sino también lo que
se puede sentir y tocar. Todo queda reducido a un mismo campo y no se puede
estar completo si se carece de una de estas, el contraste que hace entre Louisa
Gradgrind y Cecilia Jupe es un ejemplo claro de cómo dos vidas distintas con una educación diferenciada hace que una
deba guardar apariencias y ser más bien “eliminada” y cómo la otra, se hace valer
pese a no ser igual como ellos, ve el mundo de una forma distinta de la cual es
capaz de hacer ver que hay un camino que seguir que puede llevar a un bienestar
incluso mejor que el trazado.
Al final de este libro quiere dar un toque
moralizante dando a entender que no todo se rige por una buena educación y una
muy buena posición social, los altos cargos caen y, en esta caída puede que no
se recuperen jamás. Alguien que está en un escalón muy por debajo, puede tener
una vida mucho más tranquila y que acabe con un final feliz mientras que, uno que
goza de un bienestar, tenga más dificultades en un momento determinado. Da una
lección de humildad, los que menos tienen, son los que más ofrecen y pueden
ayudar en algún aspecto en donde los demás ven las puertas cerradas.
Demuestra que la sensatez no solo recae en un sector
tan reducido sino que, puede vivir con alguien tan insignificante como puede
ser la hija de un payaso, tener la agudeza de saber que está pasando a su
alrededor careciendo de una educación primaria y tan necesitada. El dialogo no solo
se les da bien a los parlamentarios sino que es un don que puede nacer de
cualquier persona independientemente del origen, destaca la humildad de esta
clase y lo poco que necesitan para poder seguir con su camino esperando que
algún día la suerte cambie.